A partir de una revision de la carrera de Daniel Buren artista frances nacido en 1938, en Boulogne-Billancourt, Francia, y considerado uno de los artistas mas importantes de nuestro tiempo, en unlapso de aproximadamente 35 anos se puede seguir su interes por la exploracion de las relaciones entre grafica y arquitectura, en diversas etapas y de diversas formas.
La primera etapa de su produccion artistica se consolido a finales de los sesenta, decada que estuvo regida por la critica hacia la institucionalizacion del arte y la busqueda de la desaparicion del autor en la obra artistica; su obra se desarrollo inicialmente junto y en relacion con los elementos arquitectonicos que se encuentran en la ciudad para transformarse hacia principios de los ochenta en elementos arquitectonicos que conforman y delimitan un espacio.
Este texto propone, desde una revision de su etapa inicial entre las decadas de los sesenta y setenta, una reflexion sobre la construccion del espacio arquitectonico y la ciudad como un elemento heterogeneo y cargado de significados y cualidades
La primera propuesta de la obra de Buren fue la de crear imagenes sin composicion, contenido o narrativa, utilizando como soporte como lienzo elementos arquitectonicos que podrian ser encontrados en la ciudad, como espectaculares, puertas, ventanas, muros, etcetera. Esto lo desarrollo desde una unica grafica plasmada en sus lienzos, que creo a partir de un patron repetitivo producido de manera mecanica. La meta, crear -lo que llamaria el artista- una imagen “neutral”, que remitira mas que a si misma, para asi provocar la reflexion del que observa desde la contemplacion del contexto, la arquitectura y la ciudad que rodeaban el lienzo y la imagen, con el objetivo de trasladar la narrativa de la obra al contexto.
El fin de la obra era provocar la reflexion por medio de las imagenes sin composicion o accidente alguno, para convertirse ella misma -la obra- en un accidente en relacion con el lugar donde era emplazada y, por lo tanto, presentada
dia a dia en las ciudades.
El metodo para lograr esta grafica repetitiva incluyo alternar tiras de color-blanco y verde, azul o naranja- de 8.7 cm de espesor, para producir un material prefabricado. El proposito, mostrar “algo creado” mas no “algo creado por alguien”,
La propuesta de Buren en esta etapa era la eliminacion de la ilusion, de la estetica, de la sensibilidad y la expresion individual; la idea era que el observador pudiera encontrarse solo con el mismo, confrontado con el mismo ante una “cosa” anonima que no le daria ninguna respuesta, sino la posibilidad de una mera contemplacion desinteresada de la ciudad y la arquitectura, a partir de la no visibilidad de una grafica repetitiva en sus lienzos. El arte ya no se encontraria mas ahi, se trataria de otra cosa.
El sentido: la no evolucion y la no perfectibilidad de la grafica en pos de una neutralizacion de la imagen y de la visibilidad del contexto que rodeaba el lienzo.
La repeticion no era una especie de ritual que solo tendria la funcion de “resacralizar” el arte, sino el esfuerzo de crear una imagen que se referia mas que a si misma, con valor por y a partir de si misma,
La repeticion no era
En relacion con lo anterior, en su escrito “Mise en garde!”,
Se puede decir que las diferencias son lo que hacen la repeticion, y que no es cuestion de hacer lo mismo con tal de decir que es identico a lo anterior -lo cual seria redundante-, mas bien la repeticion de las diferencias con una perspectiva de la misma cosa.
A partir de esto, la obra de Daniel Buren se propone hacer una observacion del espacio y, por lo tanto, una reflexion sobre el mismo al desplazar la narrativa de los lienzos desde su “neutralizacion” hacia el contexto que los rodea, para convertir la obra en un objeto unico en tiempo y espacio. El desarrollo de la grafica en su obra nos permite entonces reflexionar sobre como esta, a partir de su mera presencia en el espacio, lo resignifica, lo reconstruye y lo hace desde la aparicion y la desaparicion de la obra, desde una repeticion sistematica de su grafica.
En la obra de Buren, el lugar aparece tal como es, visto desde su propia actualidad gracias a que lo muestra como lugar de presentacion. El lugar entonces aparece junto-a, reside junto-a y en relacion con su obra desde la repeticion, la “invisibilidad” y la “neutralizacion” de la imagen; esta reaparece en cuanto tal, extendiendo sus limites y volviendo al lugar parte de si. La obra se convierte solo en un accidente del lugar como los demas elementos, no en un distractor/centro, y lo unico importante es el lugar. La propuesta misma de la obra es este “aparecer” del lugar y la revelacion del contexto, la ciudad y la arquitectura. El fenomeno de la vida cotidiana deviene imperturbable, perceptible y nunca extraordinario, pero visible ante los ojos de un observador atento.
Como ejemplos de esta propuesta, entre algunas de sus obras con las que tuvo esta exploracion se encuentran sus
Otro ejemplo de esta propuesta es su primera exposicion individual realizada en la galeria Apollinaire en Milan, en 1968. El artista cubrio la puerta principal de acceso a la galeria con sus graficos rayados, con lo que le otorgo al elemento arquitectonico el estatus de lienzo, marco, y a la edificacion, de narrativa. El plano pictorico -el lienzo- era sustituido por la puerta
Mas adelante, en 1977, Daniel Buren fue parte de los artistas que se presentaron en la exposicion “Europe in the Seventies: Aspects of Recent Art”, la cual se llevo a cabo en el Art Institute de Chicago. El artista participo con su obra titulada
La presentacion de su grafica tenia el proposito de devenir en la desaparicion de formas casi insignificantes,
Despues de este primer periodo vendran obras como
Asi es como, en esta etapa inicial de su carrera, el artista asumio el derecho a mostrarnos aquello que podriamos ver por nosotros mismos, el derecho a mostrarnos la ciudad y la arquitectura desde el emplazamiento de su obra a partir de la “neutralizacion” de una imagen, que creo a partir de una grafica repetitiva y plasmo en sus lienzos.
Sus imagenes eran producidas para ser vistas sin desviar el ojo, para darles un vistazo, a partir de la ausencia de composicion, narrativa o accidente, deviniendo ellas mismas un accidente en relacion con el lugar donde eran presentadas. A partir de la repeticion sistematica de sus graficos, Daniel Buren provoco una visibilidad del espacio desde su obra, convirtiendo este en narrativa y contenido, y desplazando el contenido a lo que rodeaba el lienzo, que ademas lo separaba y lo relacionaba con el mundo en el que estaba inserto.
El proposito, la creacion de obras
Lo que aqui se propone es la reflexion sobre el “aparecer” del lugar respecto a la obra de arte en un tiempo y espacio especificos, que la determinan y que a su vez esta determina. De esta forma, la obra de arte transforma y da sentido a su lugar de presentacion, y es entonces uno con el otro en esta relacion, como sucede todos los dias con las imagenes que vemos en la ciudad.
El espacio se convierte en un elemento crucial para la transformacion, significacion y capacidad de significar de los elementos que a su vez lo conforman. De manera concreta, la obra de Buren nos permite reflexionar sobre la formacion del espacio y como se convierte en lugar al delimitarlo, dotarlo de sentido, y como se interdetermina con cada uno de los elementos que lo conforman, haciendo que la obra artistica no pueda existir sin el lugar y viceversa: se vuelven elementos que tienen sentido entre si y que trabajan en conjunto, ya que “uno no puede existir sin el otro”.
Daniel Buren convirtio su manera de hacer arte -paradojicamente- en un estilo, que al pasar el tiempo lo caracteriza y hace desaparecer el lugar donde es emplazada la obra de arte, convirtiendose este -el lugar- en un mero contenedor que recibe la obra, mas que en un contexto que aparece a partir y junto con la misma,
Este fragmento fue dado a conocer por primera vez como un audio de tres minutos, sincronizado con una serie de diapositivas proyectadas en pinturas realizadas por los cuatro artistas en la Bienal de París de 1967, y fue tomado de Daniel Buren, Olivier Mosset, Michel Parmentier, Niele Toroni, “Statement”, en Alexander Alberro y Blake Stimson (ed.),
Michel, Foucault, “De los espacios otros”, trad. Marie Lourdes,
Daniel Buren, “Beware! (1969-70)”, traducido al inglés por Charles Harrison y Peter Townsend, en Kristine Stiles y Peter Selz (eds.),
Georges Boudaille, “Interview with Daniel Buren: Art is no longer justifiable or setting the record straight”, en Alexander Alberro y Blake Stimson (ed.),
Georges Boudaille, “Interview with Daniel Buren…”, 69.
Georges Boudaille, “Interview with Daniel Buren…”, 70.
Georges Boudaille, “Interview with Daniel Buren…”, 71.
Georges Boudaille, “Interview with Daniel Buren…”, 69.
Éste es el título original en francés del texto en inglés conocido como “Beware!...”.
Daniel Buren, “Beware!…”, 6.
Anne Rorimer, “Painting to architecture”, en
Anne Rorimer, “Painting…”, 65.
Daniel Buren, “Beware!…”, 7.
Como es el caso de Shepard Fairey y su obra
Daniel Buren, en Anne Rorimer, “Painting…”, 65.
Como es también el caso de su instalación en uno de los patios del Palais Royal en París, en 1986, que aún existe y se ha convertido en un ícono de este espacio, con lo que los objetos cobran importancia por encima del lugar.