La evaluación de relaciones lingüísticas prexistentes vía la equivalencia de estímulos
Contenido principal del artículo
Resumen
Se entrenó a adultos normales en discriminaciones condicionales A-B, A-C y D-C utilizando un procedimiento de igualación de la muestra. Los estímulos A, B y C fueron formas visuales arbitrarias. Los estímulos D para un grupo de diez sujetos consistieron en tres palabras: "fiesta”, "funeral" y "tortura." Para otro grupo de diez sujetos los estímulos D consistieron en tres retratos de una cara con expresión feliz, triste y mala. Las relaciones de equivalencia se probaron entre los estímulos D y los estímulos B, y C (D-B, B-D, A-D, C-D) pero empleando los estímulos D vistos por el otro grupo en entrenamiento. Así, los sujetos entrenados con caras fueron probados con palabras y viceversa. La equivalencia substitutiva emergió para la mayor parte, pero no todos los sujetos que mostraron equivalencia no substitutiva (la relación B-C y C-B). La equivalencia substitutiva emergió más rápidamente en los sujetos entrenados con palabras y probados con caras que viceversa. Se discuten las implicaciones de estos hallazgos para el análisis de las relaciones lingüísticas pre-existentes.